Antes de conocer la relación que existe entre estos dos términos os comentamos un poco qué significa cada uno de ellos.
¿Qué es Big Data?
Big Data es un conjunto de datos cuyo volumen, complejidad y crecimiento impiden una gestión al uso.
Tal cantidad de datos es la que se origina a través de las actuales tecnologías: web logs, identificación por radiofrecuencia, sensores en dispositivos, búsquedas en internet, información de las redes sociales, dispositivos móviles, GPS, registros de centros de llamadas, etc.
Para que un conjunto de datos se catalogue como Big Data deben ocupar entre 30-50 Terabytes a varios Petabytes.
¿Qué beneficios tiene Big Data?
Para las empresas supone identificar nuevas oportunidades de negocio, identificar patrones de conducta y generar campañas más efectivas, predecir las nuevas tendencias o gustos de los clientes, identificar problemas concretos que impiden el crecimiento empresarial, mejorar la atención al cliente.
¿Qué es la ciberseguridad?
A grandes rasgos la ciberseguridad consiste en la protección de los datos que tienen valor para una empresa, por medio del tratamiento de las amenazas que ponen en riesgo la información que es procesada, almacenada y transportada por los sistemas de información que se encuentran interconectados.
Una vez aclarados estos términos parece claro que exista una relación entre Big Data y Ciberseguridad: el Big Data puede ayudar al proceso de prevención de una amenaza.
Cotejar una gran cantidad de información permite no sólo saber qué está ocurriendo si no predecir, mediante la búsqueda de patrones, lo que puede suceder. Gracias a la extrapolación de patrones surgidos del análisis de la información de otros ataques anteriores o amenazas se nos ofrece la posibilidad de adoptar medidas preventivas.
La fase de respuesta ante una amenaza es primordial, no es lo mismo la detección de un ataque en su inicio que cuando ya se ha viralizado. El Big Data nos permite disponer de información en tiempo real del sistema sobre el que trabajamos y descubrir estados anómalos del mismo que sean provenientes de un posible ataque.
En conclusión, la capacidad de predicción y la rápida detección hacen del Big Data un aliado perfecto para la ciberseguridad.
